River - Boca. Independiente - Racing. San Lorenzo - Huracán. Sí, en fútbol se jugó la fecha de los derbis, la de los cruces más antiguos entre rivales históricos. Pero fue una fecha clásica también para el yachting nacional con la disputa de la edición 2015 de la tradicional Regata Pino Daparanti, competencia organizada, como cada septiembre, por el Club Náutico Quilmes. Entre las 51 embarcaciones que completaron el recorrido comprendido entre Olivos y esta ciudad, el más rápido fue el H20 Sabandija (YCO), mientras que el resto del podio fue netamente local: el Maxi 20 Maxi y el H20 Malugon, ambos representantes del CNQ, en segundo y tercer lugar.

El cielo, limpio y despejado, brindó un excelente y merecido marco a la carrera, la cual es en honor al gran navegante quilmeño Giuseppe Pino Daparenti, un muy recordado profesor y entusiasta del yachting argentino, quien falleció al caer al agua desde su embarcación durante la regata La Panela. En cuanto a las condiciones, el río se presentó calmo, casi sin olas, y el viento sopló de forma sostenida a 8 nudos, con rachas de hasta 10. La técnica y el conocimiento de cada embarcación por parte de las tripulaciones fueron los aspectos que marcaron la diferencia, con opciones estratégicas que incluyeron bordear la costa o ir por fuera de ella. La llegada de la flota a Quilmes demoró poco más de 4 horas y, como ya es costumbre, fue recibida con las lanchas de marinería lanzándoles latas de cerveza, una sana y festejada costumbre local.

Con el sabor del deber cumplido tras una nueva exitosa edición de una regata que mantiene un nivel competitivo alto entre los primeros puestos de cada serie y momentos muy gratos durante todo su desarrollo, desde el Náutico Quilmes anunciaron la futura realización, junto al Club de Veleros San Isidro, de la Copa Heguilor, homenaje a Jorge Heguilor, ilustre quilmeño que, con el desarrollo de la clase H20, hizo posible navegar a la clase media Argentina.