Como a la gran mayoría en el planeta, el año cambió bruscamente para Julieta Mungo. Hasta comienzos de marzo jugaba en el Club Aros León de la Liga 2 española, pero de un día para otro se volvió al país, junto a su compañera Andrea Boquete, cuando el COVID-19 ya amenazaba fuerte en Europa. Instalada en Mendoza, lleva adelante una pretemporada y espera conocer que será de su futuro. ¿Volverá a Quimsa? ¿Seguirá en Europa? La jugadora de la Selección Argentina charló de todo esto con DQ.

“Llegué a la Argentina cinco días antes que decretaran la cuarentena obligatoria. Justamente, el día que tomé el avión comenzaban a hacerla en España. Por eso, el viaje fue bastante extraño, la gente estaba muy nerviosa. Me vine para Mendoza para no influir en los horarios y en la vida diaria de mi familia… pero desde que llegué, ya no me pude mover de acá”, comenta Julieta en el comienzo de la charla en DQ Radio (FMQ 93.5).

- ¿Cómo estás vos con la cuarentena?

- Bien. Junto a Andrea intentamos llevar una rutina de entrenamientos para que el día no se haga tan largo y, de esa forma lo vamos manejando. Además, el preparador físico de Quimsa nos aporta algunos planes para completar las actividades.

- ¿Y cómo está todo por Mendoza en este momento?

- Por suerte la situación está mucho mejor que en AMBA. Recién en los últimos días volvieron a aparecer algunos pocos casos positivos, pero que fueron detectados a tiempo para que no se propague el contagio. Podemos salir algunos días, depende la terminación del documento, ya abrieron los bares y restaurantes.

- ¿Fuiste a alguno de estos lugares?

- No, la verdad que todavía me da un poco de miedo. Al final, te terminás dando cuenta que podés vivir sin tomar un café (risas). Por otro lado, para nosotros los deportistas, está bueno que podemos salir a correr… pero con el barbijo puesto.

- ¿Se extraña la pelota?

- Muchísimo. Hace dos meses que no tiro a un aro. Tenemos dos balones con los que hacemos un poco de dribbling, pero no más que eso.

- ¿Alguna vez habías estado tanto tiempo sin jugar?

- Creo que lo máximo que estuve sin tocar la pelota fueron dos mesas, en algunas vacaciones durante el verano. La verdad que nunca paré, desde que empecé a jugar nunca estuve tanto tiempo frenada por eso, estoy convencida que la vuelta va a ser linda, pero también va a ser muy dura.

- ¿Cómo fue esta experiencia que viviste en el Aros León?

- La verdad que muy contenta porque pude cumplir con todo lo que me pidieron a nivel individual y porque, a pesar de ser un plantel muy corto, terminamos dándole pelea a muchos equipos. El objetivo era tratar de estar en fase de clasificación y meternos en la lucha contra los candidatos. El torneo se suspendió a cinco fechas del final y teníamos chances porque habías encontrado un buen ritmo de juego entre todas.

- ¿Y ahora que va a pasar con tu carrera? Todavía sos jugadora de Quimsa, ¿vas a volver a Santiago del estero?

- La verdad que no lo sé. Por el momento la Liga Nacional Femenina está suspendida, pero no cancelada del todo y está la posibilidad de que se juegue cerca de fin de año. Mi intención es tratar de volver a España pero todavía no se sabe que va a pasar con ese plantel. En septiembre debería comenzar la temporada. Igualmente, lo primero que me interesa ahora es volver a Quilmes y ver a mi familia. Ya habrá tiempo para pensar en lo que viene.