Entre los 5 y los 14 el Villa Elsa fue el segundo hogar para Adrián Daniel Calello. Actualmente titular y campeón en el Dinamo Zagreb, este mediocampista central de 22 años, que supo consolidarse en la Primera de Independiente en base a gran despliegue y buena técnica, aprovechó su visita para, de la mano de DQ, volver a Su club.

- ¿Qué representa el Villa Elsa en tu vida deportiva?

- Mucho, porque es donde me crié como futbolista. Además veníamos en familia porque mi viejo pasó por diferentes cargos. Fueron 9 años en los que fui muy feliz jugando acá y me quedan todos recuerdos de momentos lindos. El club me formó y me siento en la obligación de darle todo lo que pueda de mi parte.

- ¿De qué te acordás cuando venís de visita?

- De los amigos y compañeros que, aunque no nos veamos muy seguido, cuando nos encontramos siempre charlamos. Son recuerdos que te quedan para siempre y que marcan mucho la vida de un jugador.

- De acá pasaste a Independiente…

- Sí, a los 9 mi viejo me llevó a probar y quedé. Desde el primer año tuve el honor de ser capitán en todas las divisiones. Fueron muchas pretemporadas difíciles y mucho esfuerzo que cuando llegás a Primera no lo olvidás.

- Igualmente seguías jugando para el barrio…

- Los sábados para Villa Elsa y los domingos para Independiente y EDIC ¡tres partidos por fin de semana! Cuando sos chico haces locuras porque no te cansas nunca y no te importa nada.

- ¿Cuándo dejaste los otros clubes por el Rojo?

- Ya cuando empecé en Independiente me decían que no jugará más para los otros equipos, pero no podía porque para mí era un sentimiento. Seguí hasta los 14, que era el tope, y en EDIC un año más, en el que salimos campeones.

- Y llegaste a Primera…

- Sí, en 2007 con Burruchaga. A los 17 había ido de pretemporada con Falcioni, jugué todo el año en Reserva y a los 18 debuté en el torneo de verano. Mi primer partido oficial fue contra Boca en cancha de Racing.

- Te consolidaste rápidamente…

- Tuve la suerte de ser considerado por todos los DTs. Estoy muy agradecido a ellos y a los técnicos de inferiores.

- ¿Quedó algo pendiente de tu paso por ahí?

- Si fuera por mí hubiera jugado toda la vida en Independiente. Me quedó pendiente el gol, igualmente sé que el día de mañana voy a volver, porque es el club en el que me crié de chiquito y al que amo.

- ¿Cómo se dio la transferencia al Dinamo?

- Había tenido la posibilidad de ir al Atalanta y se cayó. Pero sabía que a los seis meses me iba a ir seguro. Entonces averigüé bien sobre Zagreb como ciudad y sobre el club, iba 1º y jugaba la UEFA. Como experiencia me está sirviendo muchísimo por todo lo que estoy aprendiendo a nivel futbolístico y de vida.

- ¿Vas a cambiar de aires próximamente?

- Estoy muy cómodo, pero me gustaría pasar a una liga más competitiva. La idea, ya con el pasaporte comunitario, es ir a Italia, aunque mi sueño siempre fue Inglaterra. Así tendré más posibilidades de ser visto por el técnico de la Selección y, mientras tanto, seguiré aprendiendo cosas.