Si hablamos de los festejos por el cumpleaños de la ciudad, desde hace 18 agostos es ineludible referirnos a la Copa Quilmes Aniversario, la cual es realizada con gran éxito por el Club de Ajedrez local. Su nueva edición se disputó el domingo y, a pesar que el Día del Niño les jugó una mala pasada, tuvo una participación importante, con 170 jugadores de distintas partes del país. Torre Blanca conquistó la Copa Quilmes, Juego Ciencia la Copa de la Dama y la Federación del Sur -que integra la Escuela Municipal- la Copa Ciudad de Quilmes. Jorge Plazaola, presidente de la centenaria institución organizadora, analiza los pormenores del certamen.

- ¿Cómo vivieron esta nueva edición?

- Estamos muy contentos con como salió. Estuvo bárbara a pesar que por el Día del Niño bajó bastante el número de participantes ya que los clubes que traían 50, esta vez vinieron con 25, pero en realidad fue un éxito. Para nosotros ya es un éxito haber hecho la edición número 18 y va a ser un éxito hacer la 19, vengan 500 o 100. Ese es el objetivo que tiene el club: poder continuar realizando la Copa Quilmes a lo largo del tiempo.

- Y el nivel volvió a ser alto…

- Sí, hubieron chicos que disputaron el Campeonato Panamericano. Fue un torneo fuerte como siempre. Además el lugar estuvo bárbaro, en la Escuela CIMDIP que nos abrió las puertas. Hubo una gran participación sobre todo de chicos de Quilmes porque el colegio trajo a 25 que se sumaron a los del Club y de la Escuela Municipal.

- Además, compitieron ajedrecistas de distintas localidades…

- Vinieron representantes de Azul, Junín, Capital Federal y todo el Gran Buenos Aires y, como anécdota, hubo un chico de Jujuy que está de vacaciones en Buenos Aires y se acercó a jugar la Copa. Estamos contentos.

- Tienen el mérito de sortear distintas adversidades: una vez fue la Gripe A, en otra oportunidad las Elecciones, ahora el Día del Niño y, a pesar de esos contratiempos, la Copa sigue siendo un éxito...

- Es verdad. El mayor éxito es que al hablar con la gente que viajó desde lejos vemos que se van contentos. A pesar que se trata de un torneo largo, que en sus características es uno de los pocos que quedan, nos dicen que está bárbaro así y que sigamos de esta manera, con 30 minutos por jugador. Esa también es la alegría que nos queda: la organización salió impecable.

- ¿Qué significa estar tan cerca de cumplir los 20 años del torneo?

- Es el gran paso que dimos. La Copa Quilmes, desde el punto de vista económico, es totalmente deficitaria, pero tiene otro sentido: que la ciudad sea conocida. Hace 18 años, cuando comenzamos con el torneo, no nos conocían ajedrecísticamente y tenían una muy mala imagen nuestra, pero eso se fue revirtiendo y hoy viene gente de todos lados que se va contenta y te manda mensajes de agradecimiento. Eso es lo importante: que trascienda el Club de Ajedrez y que el certamen esté instalado en el calendario nacional. Actualmente está el Peoncito de Junín, un torneo tradicional de tres días que tiene 22 años, y después viene la Copa con 18. Es mucho tiempo y vamos a apuntar a los veinte.

- ¿El objetivo es ese?

- La idea es que el torneo continúe siendo conocido, que siga con las características que tiene y, fundamentalmente, que cada vez haya más gente de Quilmes jugando al ajedrez, porque el objetivo final del club es que el ajedrez crezca en la ciudad.