Todo cambio genera su necesidad a una re-adaptación, pero en este caso parece que no fue necesario. Luciano Capra cambió su marca de paletas para afrontar el resto de la temporada en el World Padel Tour. La empresa Sioux lo tomó como referente, pero más allá de tanta confianza, casi sin probar la paleta tuvo que saltar a la cancha y disputar el torneo Challenger de Lisboa. Pero, pese a que las expectativas no eran altas, pudo avanzar hasta las semifinales del certamen.

Fue una apuesta importante para Capra, ya que firmó un lunes con su nueva marca de paletas y al jueves siguiente ya debió saltar a la cancha para afrontar un compromiso complicado. A pesar de esto, Luciano y el Godo Díaz llegaron hasta las instancias definitorias y cayeron con la pareja que luego se coronaría campeona del torneo.

Capra salió adelantado en el certamen, por ser cabeza de serie, y en el debut por los Octavos de final derrotó a otro quilmeño, Guga Vázquez, y su pareja Borja Iribarren, muy ajustadamente por 6-2, 6-7 y 7-6. En Cuartos, venció a David García Campos y Víctor Ruiz por 6-2, 6-7 y 6-3. En la semifinal con Ruiz-Marina cayó por 4-6, 6-4 y 7-6 un partido muy parejo, que se les escapo por muy poco, y con Díaz lesionado desde el primer set.

El otro quilmeño que participa del WPT, Fabricio Cattáneo, junto a Melgrati partió de pre-previa y logró entrar a cuadro, donde perdió en Dieciseisavos contra Tamame-Nicoleti por 7-6 y 6-3.

La próxima cita del circuito de profesionales es en Palma de Mallorca, a partir del domingo 19.