Diego Milito ya empezó a pagar con creces, el dinero que invirtió el Inter para quedarse con su pase y sumarlo a su plantilla. El delantero convirtió los dos goles en la victoria de su equipo en el Derby frente al Milan. Y aunque el encuentro se haya jugado en Boston y tuviera calidad de amistoso de pretemporada, al bernalense le sirve para comenzar su idilio con los tifosi del Neroazzurro, que buscan reemplazar los gritos que les aseguraba el sueco Ibrahimovic.

En el balance final del juego disputado en los Estados Unidos, el Inter fue superior a su clásico rival. Su entrega total desde el minuto cero, se vio beneficiada enseguida con el tanto que a los cuatro, le permitió ponerse arriba en el marcador: pase largo del Cuchu Cambiasso (la lista de argentinos la completó Javier Zanetti), corrida de Milito, que encaró al área, amagó frente a un rival y remató de zurda al primer palo de Kalac, que nada pudo hacer para evitar que la pelota se introduzca en el arco.

Para la segunda emoción de la jornada, hubo que esperar hasta la segunda mitad. En medio de un panorama en el que el Inter regulaba con su ventaja y su rival se desesperaba por n encontrarle la vuelta al juego, a los 30 minutos el oriundo de Bernal aprovechó una contra y entrando al área, remató de derecha. El resto fue todo ayuda estuvo del arquero, que puso mal el pie y luego de rebotarle, la pelota se le fue para adentro.

Al minuto después, José Mourinho (el DT) decidió reemplazarlo al goleador, para que la parcialidad del Inter desbordara en aplausos. A esa altura, la carta de presentación era más que positiva.

El estreno oficial de Milito en el Inter se producirá el sábado 8 de agosto, cuando estos enfrenten a Lazio por la Supercopa Italiana, el trofeo que enfrenta a los ganadores de la Liga y de la Copa, que siempre abre la temporada futbolística.