Y llegó el fin de semana tan esperado por todo el Turismo Carretera. Los 1000 Kilómetros de Buenos Aires es una competencia de larga duración donde Mauro Giallombardo, con el Ford Nº 129 del Werner Competición, busca cumplir con el objetivo de conseguir el mejor resultado posible en una fecha histórica para la categoría más popular de la República Argentina y por consiguiente, ratificar sus intenciones de ser candidato dentro la próxima Copa de Oro.

“Hace mucho tiempo que se empezó a hablar de esta carrera y es algo demasiado importante para el TC que está cumpliendo 80 años. Más allá de lo deportivo, es muy especial por diferentes motivos, hace varios años que en el país no tenemos una competencia de este tipo, al mejor estilo de la Endurance en Europa, con un autódromo repleto de gente, el hecho de estar corriendo es un premio para el piloto y el ganador se quedará con un pedacito de la gloria”, confesó MG.

Además expresó que “tengo la enorme satisfacción de sumar como director de equipo a Luciano Crespi, quien está trabajando en Suiza. Siempre es fundamental tener a alguien así para dirigir la orquesta en una carrera de larga duración. Hay que seguir una estrategia, una planificación y tiene que haber una persona con la cabeza fría que tome decisiones para corregir puntos flacos o situaciones que se puedan dar con el correr de las vueltas”.

“Busqué y conseguí armar una tripulación donde pude conjugar el conocimiento del Circuito 12 y la experiencia que se pueda tener arriba de un Ford de Turismo Carretera. Hay muy poco tiempo para girar y no se puede desperdiciar con la adaptación a la marca, la intención pasa por sumar datos y poder dedicarle mucho más tiempo a la estrategia. Tanto Leonel Sotro como Adrián Oubiña son jóvenes y saben muy bien lo que es el TC”, indicó la Rana de Bernal.