Seguramente está atravesando uno de los momentos más flojos de su campaña. Después de un arranque de candidato, Unión Ezpeleta entró en una medianía en cuanto a nivel y resultados que empiezan a complicarlo pensando a futuro. Inmerso en una irregularidad, sumó una nueva derrota como local por la vigesimoquinta fecha de la Primera B: cayó por 3 a 2 en un partido apretado ante Huracán y quedó ubicado en el último puesto de clasificación a los playoffs.

Sin sobrarle demasiado, ahí anda el Unión. Frente a rivales que no están entre los más encumbrados y que tienen un montón de limitaciones, el equipo no ha podido mostrarse superior en las últimas semanas. Y encima, ahora le tocó caer ante un adversario directo en la lucha por meterse en la clasificación por el segundo ascenso. Huracán le ganó como visitante y quedó a solo dos puntos en la tabla de posiciones.

Es cierto que el encuentro fue parejo, que podría haber quedado para cualquiera de los dos, pero otra vez, la falta de eficacia terminó jugándole en contra a los de Ezpeleta. Entonces, sumó su octava derrota sobre veinticuatro encuentros disputados, números que muestran el bajón en el nivel actual del equipo que ya dejó de ser confiable.

Ante otro rival que se ubica entre la parte baja de las posiciones como Lamadrid, tendrá revancha en la fecha próxima. Justo antes de quedar libre, buena oportunidad para volver a tomar confianza pensando en ponerse a trabajar con todo para afrontar la parte decisiva de la temporada regular.