“Es un gran orgullo pero también una enorme responsabilidad”, asegura un emocionado Aníbal Cianciaruso, confesando sus emociones de cara al próximo desafío de su exitosa campaña de 34 peleas rentadas. Y no es para menos, el domingo 20 estará subiendo al ring del mítico Korakuen Hall de Tokio para enfrentar al japonés Katsuji y convertirse en el primer argentino en protagonizar un duelo mundialista de la World Kickboxing Association (WKBA). El combate, válido por la corona de la división de los Supermedianos, se erige como un hecho histórico para el deporte nacional y, el quilmeño representante de Ihara Dojo, promete dejar todo buscando el nocaut desde el primer round.

- ¿Cómo se dio esta oportunidad de disputar el título del mundo?

- La veníamos buscando desde hace tiempo. La corona está vacante debido al retiro del último campeón y, como soy campeón sudamericano de la Confederación Sudamericana de Muay Thai tengo la proyección para aspirar a un título del mundo. Los japoneses le dan mucha importancia a nuestros títulos y mi entrenador, Diego La Volpe, logró cerrar la pelea con los promotores.

- ¿Qué se siente ser el primer argentino que irá por esta corona?

- Es un enrome orgullo, pero también una gran responsabilidad. Orgullo porque vamos a ver a nuestra bandera en lo más alto y responsabilidad porque somos un equipo que estamos dejando todo por Argentina.

- ¿Esto le agrega presión a la preparación y a lo que será el combate?

- La presión siempre está, desde el primer día. Cuando lleguemos a Japón esta presión se transformará en ilusión para todo el team.

- ¿Este hecho lo convierte en uno de los combates más importantes de tu campaña?

- Ser contendiente en una pelea mundialista es el mayor privilegio al que aspira todo luchador, acá y en cualquier lugar del mundo. Este momento es el de mayor felicidad y lo aprovechamos al máximo.

- Se acerca la fecha, ¿cómo viene tu preparación? ¿la terminarás en Tokio en los días previos al duelo?

- Sí, una semana antes de subir al ring culminaremos en Japón el trabajo que iniciamos 60 días antes en Quilmes. Allá ajustaremos los últimos detalles de la parte técnica con el gran Kaicho Ihara, maestro japonés de gran trayectoria y, desde mi punto de vista, el mejor entrenador del mundo.

- ¿Conocés a tu rival? ¿Cuál será el plan de pelea para enfrentarlo?

- Nos vimos en mi última presentación allá en 2018. Nuestro plan es salir agresivamente como siempre hago.

- Con tu larga trayectoria en Muay Thai, ¿cuáles son las mayores diferencias que encontrás a la hora de combatir en Kickboxing japonés?

- Tengo 34 peleas profesionales y pude combatir en casi todos los países de Sudamérica, en Japón, Tailandia, Rusia, Irán y México. No hay diferencia en las técnicas permitidas, lo que varía es la forma y la manera de pelear. Allá el combate debe ser frontal y agresivo, siempre buscando el nocaut, desde el primer al último asalto.

Desde el rincón

Por Diego La Volpe *

Para los que ya tenemos tiempo en este camino muchas veces es difícil poder proyectar al ver como todo va cambiando en este mundo oscuro y salvaje con personas que solo buscan confort y bienestar. “La gente es débil”, me decía mi entrenador y cuanta razón tenía, aunque mi juventud rebelde siempre cuestionaba su sabiduría. Pero el día de ver la realidad siempre llega.

En aquella época se luchaba por el gimnasio y por la bandera. Hoy los peleadores solo piensan en “su sueño” y se hunden en su propia fantasía. Sin embargo, hay esperanza porque siempre surgen personas diferentes, personas que iluminan.

Aníbal comenzó a entrenar en 2007. Dedicado y respetuoso viajó por el mundo dando batallas, se convirtió en campeón pero, aún mas importante, se convirtió en referente de “los nuevos”, de los que vienen.

Ahora tenemos el combate soñado, el que todo luchador espera en todo rincón del planeta. La pelea que nos hace verdaderamente iguales como seres humanos, porque los sentimientos son los mismos: ilusión, templanza, miedo, orgullo y, además, en el ring la sangre es únicamente roja. Creo absolutamente en el espíritu humano y en que la vida es mágica y siempre enseña.

Doce años entrenando diariamente a este gran ejemplo de deportista y de persona me dejan tranquilo, porque la verdadera pelea ya esta ganada.

* Entrenador de Aníbal Cianciaruso.

El entrenador

Diego La Volpe es un artista marcial con 30 años de trayectoria y un total de 48 peleas en el exterior. Campeón argentino de Karate Kyokushin en tres oportunidades (1998, 1999 y 2000) y Medalla de Bronce en el Mundial de Japón 2013. También campeón argentino de Kickboxing en 2002, 2003 y 2005.

En 2005 inauguró la Sucursal Argentina de Ihara Dojo en el Club Alsina, institución histórica de Quilmes que con mucho esfuerzo de los socios y su comisión directiva reabrió sus puertas a la comunidad.

Ihara Dojo Japón es el gimnasio de kickboxing más importante del mundo y sus autoridades vinieron a Argentina para dar el puntapié inicial a su filial local en el aspecto tanto deportivo como social.

A través de su relación con los dirigentes japoneses, se convirtió en un apasionado de su cultura e historia, escribiendo artículos para diarios y revistas especializadas hasta que, en mayo de 2019, presentó en la 45° Feria del Libro de Buenos Aires, Kickboxing, Espíritu Samurai, obra en la que resume parte de la historia de este arte marcial creado en Japón contado por sus propios protagonistas.

Bajo la misión de trabajar incansablemente por el sano desarrollo de la juventud a través del deporte, Ihara Dojo Argentina generó 23 campeones argentinos, 3 campeones sudamericanos, 2 campeones panamericanos, 1 campeón japonés, 2 medallas de Bronce en Mundiales y el orgullo de haber presentado a la primer mujer extranjera en luchar profesionalmente en Japón.

Actualmente es Director Internacional de la WKBA, presidente de Ihara Dojo Sucursal Argentina y vicepresidente del Club Alsina de Quilmes.