Si bien, hubo una base del plantel pasado que se repitió en este estreno en Lomas, la idea de juego del nuevo cuerpo técnico (NdeR: distinto a lo que profesaba Monzón) y la falta de trabajo durante la pretemporada, ante la falta de entrenamientos y amistosos, sumado a un cambio de DT en el medio, obligaban a mirar detenidamente cual iba a ser el nivel del Mate. Pero el equipo estuvo a la altura, dentro de un partido de orden malo, tirando a muy malo.

Después de un buen arranque de la visita, hubo una jugada clave que marcó el resto del partido: un buen pelotazo largo para Franco Sosa, uno de los debutantes en el Criollo, obligó a la salida apresurada del arquero Federico Díaz, que tocó el balón con la mano fuera del area y dejó a Los Andes con un futbolista menos en el campo.

Pese a eso, el andar del juego fue bastante parejo, con el Milrayitas siendo el de más tenencia y protagonismo. Pero la más clara de la primera etapa sería para Argentino: un desborde y centro de Nahuel Figueredo lo encontró mal parado al golero suplente Leandro Brey, y Camilo Machado no pudo conectar bien de cabeza.

La tónica fue parecida durante la parte complementaria. Los cambios propuestos por el banco local, le inyectaron más dinámica y velocidad en la ofensiva, pero carentes de definición terminaron opacados por un Celeste que casi nunca quedó mal parado. Y pese a tener un montón de imprecisiones, una llegada a fondo de Machado obligó también a la intervención del arquero, sin que nadie pudiera definir la jugada.

En el cierre, el árbitro Pafundi fue benévolo con el Mate al no cobrar penal ante una mano clara de Elías Martínez. Hubiera sido un castigo innecesario para un Argentino de Quilmes que, pese a carencias y dificultades, luchó el partido y merecidamente arrancó la temporada sumando.

Foto: Los Andes oficial