En un encuentro de trámites cambiantes y protagonismos repartidos, Quilmes y Defensa terminaron igualados, desperdiciando una buena chance de seguir prendidos cerca de la punta. Fue un tiempo para cada uno. El local se puso rápido en ventaja y parecía que podía llegar a liquidarlo, pero en el segundo se quedó, Quilmes mostró una gran mejoría, fue audaz, lo empató y hasta podría haberlo ganado. Conformidad en los de Bianco pro la imagen mostrada.

Varela recibió el partido en medio de una verdadera fiesta popular. Como nunca, el Tito Tomaghello vio colmadas sus instalaciones, ya que en la ciudad este encuentro es una verdadera final. Justo en el fin de semana del Superclasico, la gente del Halcón vivió el propio en la soleada tarde del sábado.

Y si la alegría no fue hasta el fin, se debe a la irregularidad que mostraron ambos dentro de la cancha, que los obligó a tener momentos buenos y otros muy malos. Un primer tiempo en el que Defensa arrancó con todo (con gol de Frontini, tras una pelota parada inclusive) y parecía que iba a llevárselo por delante (algo que no sucedió) y un segundo, en el que el Cervecero fue a quemar las naves y bien cerca estuvo de ganarlo, si no hubiese sido por la impericia ofensiva.

Claro que, si se toma en cuenta el balance de la jornada, quizás el empate no se vea con malos ojos para Bianco y compañía. Sobre todo, porque al final del primer tiempo, nadie podría haber supuesto una levantada tal del visitante, que lo transformó en patrón casi absoluto de las acciones en esa instancia final.

Envuelto en la audacia y la velocidad de Maxi Planté (se perdió un gol increíble) y Juan Olivares (empezó mal y terminó en buen nivel) y el coraje y la entrega constante de Ramón Lentini, el QAC se la jugó en ataque, sostenido en defensa por la habitual eficiente tarea de Trípodi y Ribonetto.

Así, comenzaron a llegar las acciones, hasta que un cabezazo bombeado de Meza Sánchez, luego de un corner desde la derecha, le do la ya merecida igualdad a esa altura. A partir de ahí, los nervios se incrementaron en el local y de no ser por la falta de definición constante en el equipo, tendría que haberse quedado con el triunfo.

Los dirigidos por Almirón crecieron en el final y en el cierre tuvieron una clara, con un cabezazo que el arquero cervecero atrapó en dos partes. Pero ya estaba todo juzgado y el final llegó ante un silencio general. Ese mismo que genera el punto conseguido por ambos. Es que, no se perdió y en un torneo largo es importante, pero por interese compartidos, a los dos les quedó sabor a poco en la boca.

Síntesis

Defensa y Justicia (1): Leyenda; Foglia (ST 27’ Mánquez), Frontini, Marcos Ramírez, Lucas Bustos; Garnier, Ariel Franco, Lorefice, Jonathan Chávez (ST 42’ Kissner); Patricio Pérez (ST 33’ Leandro Fernández); Juan Martín. DT: Jorge Almirón. Sup: Maximiliano Gagliardo, Claudio Grecco, Rodrigo Soria y Pablo Bueno.

Quilmes (1): Trípodi; Noce, Ribonetto, Quiles, Di Gregorio; Seri, Meza Sánchez (ST 25’ Marcelo Guzmán), Francisco Cerro, Olivares; Planté (ST 18’ Narvay) y Lentini (41’ Sava). DT: José María Bianco. Sup: Pontiroli, Piarrou, Kalinski y Mauricio Carrasco.

Goles: PT 3’ Frontini; ST 15’ Meza Sánchez.

Amonestados: Ramírez, Pérez, Fernández (D); Noce, Quiles y Guzmán (Q).

Arbitro: Daniel Raffa (Regular).

Asistentes: Juan Carlos Rebollo y Mariano Belinco.

Estadio: Norberto Tito Tomaghello.