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Ya Sergio Martínez era un respetado campeón que figuraba entre los 10 mejores libra por libra de cualquier ranking, pero ahora es simplemente el mejor de todos. Así lo entendió el CMB al galardonarlo -junto al ucraniano Vitali Klitschko- como Boxeador del Año (2009) en la Noche de Campeones, realizada a fines de mes en Cardiff, Gales. Mientras, sigue la novela de su futuro rival.

Cuando en el Reino Unido Maravilla recibía su premio con la forma del puño derecho de Mike Tyson, en las oficinas de HBO continuaban las negociaciones. Como adelantó DQ, el combate se confirmó como estelar para el mes de octubre, pero se postergó del 2 al sábado 9. Eso sí, el plan A, la esperada revancha ante Paul Williams, con el título mediano del quilmeño en juego, volvió a tomar fuerza a pesar que el norteamericano estaba planteándose bajar de categoría. De no concretarse, el reemplazo sería el mejicano Alfredo Perro Angulo, aunque en las 154 libras.

Ante esta chance Martínez, hábil de reflejos como en el ring, apuró la decisión del azteca: “Angulo dijo que peleará con cualquiera, entonces que pelee por mi ex título en Superwelter. Ya vimos que el Perro puede ladrar, veremos ahora si puede morder”.

Corriendo de más atrás figuran dos retadores que desean unificar ante Maravilla, pero sus posibilidades son casi nulas por no ser rivales atractivos para el mercado norteamericano. Ellos son el titular interino mediano del CMB, el alemán Sebastian Zbik, quien recientemente venció por decisión unánime al rionegrino Sebastián Heiland, y el ruso Dmitry Pirog, flamante monarca en la misma categoría en versión OMB.

Por último, el cinturón verde y oro de las 154 libras que abandonara Martínez, a pesar de ser considerado el mejor púgil en ese peso, podría ser disputado el 13 de noviembre entre Antonio Margarito (solo dos combates en dicha categoría) y Manny Pacquiao, quien debutaría en la división.