...hay esperanza. Eso es lo que debe pensar el plantel de Quilmes B, que volvió al triunfo después de varias fechas, nada menos que con una goleada 4 a 2 ante Hurling en el Anexo Cervecero. De esta forma, los dirigidos por Javier Gammo mantienen la ilusión de conservar la categoría, a pesar que aún la tienen complicada. Por otra parte, segunda derrota consecutiva del A, esta vez ante Banco Provincia.

Ambos equipos se jugaban mucho más que tres puntos, en su lucha semanal por evitar el descenso. Los cerveceros llegaban últimos en la tabla de posiciones y con una racha de siete partidos sin triunfos, en los que habían acumulado seis derrotas y un empate, que los dejó tan comprometidos. Por su parte, la visita tampoco tiene demasiado aire desde su 11º puesto. En consecuencia, ambos conjuntos salieron a la cancha con la obligación de obtener los tres puntos, ya sin margen para cualquier error.

Y pese a las urgencias compartidas, se hizo un partido agresivo, con situaciones en ambos arcos y con alternativas cambiantes, que lo hicieron dramático casi hasta el final del mismo. Hurling comenzó un poco mejor y se puso en ventaja a través de Agustín Catán, pero enseguida reaccionó el local y Germán Becker puso el primer empate parcial. Pero cuando Quilmes pasaba por su mejor momento de la etapa, otra vez llegó la diferencia rival, con el gol de Patricio Mac Cormarck.

Tocado en su orgullo, el elenco cervecero salió a jugar el segundo tiempo apelando a la garra, el corazón y el espíritu que es su marca registrada, que en muchos momentos lo sacó de momentos complicados. Por eso, en el minuto inicial llegó a la igualdad por medio de Patricio Mauri.

A partir de ahí, el encuentro creció en intensidad y dramatismo, hasta que el QAC volvió a ser recompensado por su vocación ofensiva y quien mejor que su goleador, Gabriel Encinas, para dar vuelta el marcador. Y el triunfo terminó de confirmarse con el tanto de Mariano Becker a poco del final, que generó el delirio y descontrol de los hinchas presentes.

Fue un primer paso importante para buscar la hazaña. Quedan tres partidos y para Quilmes B, mientras haya vida, habrá esperanza.