Por Leonardo Testa

El resultado menos pensado. Las chicas de Quilmes A cometieron errores claves en cada uno de los goles de su rival, y terminaron sufriendo una goleada histórica en su propia casa. Más allá que los resultados rivales ayudaron y que hasta el momento dependen de sí mismas, ahora tendrá que esperar una semana más para poder festejar que siguen un equipo de primera. Encima, en la fecha final enfrentan a un rival directo.

Desde un primer momento, Hurling demostró sus intenciones en el partido. Al primer minuto, forzó su primer mano a mano, y a los siete ya estaba celebrando el primer gol. El local perdió la bocha en ataque, Silvina Dell ‘Era encabezó la contra, asistió a Sofía Albarracín, quien capturó un rebote y sacó un disparo que se convirtió en el festejo inicial de la calurosa tarde quilmeña.

A partir de este momento, el conjunto dirigido por Javier Gamo no tuvo reacción, no lograba hacer dos pases seguidos, le faltaba peso ofensivo y en defensa demostraba grandes falencias, que su rival las aprovechaba al máximo. La visita hacía un partido con poco brillo, no demostraba el nivel que la llevó al lugar de privilegio que ocupa en la tabla. Sin embargo, llevaba a la perfección su libreto de defender y salir rápido de contra.

A los 24 minutos, se produjo el mejor gol de la tarde: Tatiana Minadeo recibió un pase entre líneas, quedó mano a mano con Nadia Scott, y con un toque categórico salió a celebrar el segundo tanto de su equipo. Entonces, se terminaba la primera mitad con una exagerada diferencia en el marcador, pero que se explicaba por la eficacia del rival, ya que el QAC tuvo dos cortos a su favor, y cuatro remates al arco (un mano a mano), sin embargo no pudo convertir.

En la segunda etapa, la visita golpeó de entrada, a la salida de un corto, Mercedes Socino comenzaba a decretar la victoria del conjunto dirigido por Rolando Rivero. Las cerveceras no lograban entender el juego, les faltaba desborde, buscaban atacar por el centro y así, le facilitaban la tarea a la buena defensa que había plantado el Verde.

A los 16 minutos, Hurling volvió a aprovechar un error en ataque de Quilmes, y tras un contraataque letal, Eugenia Ferrero empujó la bocha para decretar el 4-0. Los minutos eran cada vez más largos, eternos para las chicas del QAC, que no lograron hacer pesar sus individualidades.

Y cuando estaba por sonar la chicharra, Socino puso la frutillita del postre y terminó de decorar una goleada histórica (primera vez en el año que el QAC pierde por esa diferencia y que le hacen cinco goles en un mismo partido).

Con el empate de Banco Provincia y la derrota de San Martín, Quilmes sigue dependiendo de su partido ante el CASI, pero por las dudas tendrán que alentar para que el rival de esta, vuelva a ganar la semana que viene, cuando enfrente al Pirata.