Era una cuestión de obligación para demostrarse que todavía estaba vivo. Después del duro golpe sufrido en el choque clave de la fecha pasada, Argentino de Quilmes debía ganar si o si en su nueva presentación. Y, si bien enfrente tuvo un rival molesto como Yupanqui, logró su objetivo casi sin sufrimiento, más allá del marcador final. De esta manera, los dirigidos por Fernando Rizzo sumaron tres puntos y le meten presión a Fénix para su compromiso del sábado.

Se mantiene en la pelea. Esa es la conclusión más importante para sacar, de cara al tramo definitorio del certamen. Para continuar en la lucha, el equipo debía demostrar que podía levantarse del golpe más duro que debió asimilar en lo que se lleva disputado de la temporada. Y el equipo lo hizo de buena manera, con una victoria justa, volviendo a marcar varios goles y sumando tres puntos en calidad de visitante.

Desde un primer momento, el Mate fue un poco más activo en función ofensiva, por eso logró ponerse en ventaja, a los 29 minutos y a través de Sebastián Benítez. Pese a diferentes situaciones, nada cambiaría en ese tramo inicial y el resto de las emociones se darían en el complemento. Y el equipo pegó de entrada gracias al gol de Diego Leguiza a los 35 segundos.

A partir de esa diferencia, los de Rizzo le dieron ciertas ventajas al rival, que aprovechó para llegar al descuento a los 14 minutos, por medio de Gastón Aranda. Pese a algunas zozobras, a los 35 otra vez apareció Benítez en el tanteador, para sentenciar la historia. El segundo tanto de Aranda, a los 48 minutos de la etapa, no cambiaría la historia.

De esta manera, el Mate sumó tres puntos importantísimos para mantenerse expectante. Llegó a las 54 unidades, uno más que el hasta ahora líder Fénix, que este sábado estará jugando su compromiso ante Atlético Lugano. Y demostró que el titulo sigue en disputa, que no ha tirado la toalla antes de tiempo.