Después de un arranque de temporada tambaleante, parece haberse encontrado el equilibrio. Es que el Unión consiguió su segunda victoria de manera consecutiva, esta vez como local. Ante la presencia de una gran cantidad de público en el Coloso de Ezpeleta, el equipo dirigido por Marcelo Calahonra goleó por 8 a 2 a Los Muchachos. Yendo de menor a mayor en este comienzo de campeonato, la ilusión de dar pelea comienza a hacerse realidad.

En la previa, el panorama se presentaba favorable para los de Ezpeleta. En primera instancia, porque la visita no podía contar con 4 de sus jugadores titulares debido a una suspensión que arrastraban desde la segunda fecha. Y después, porque en los locales regresaban dos de sus jugadores más experimentados tras haberse recuperado de sus respectivas lesiones: el arquero Pablo Penovi, ausente desde la segunda fecha, y Maxi Zanello, quién no jugó la semana pasada frente a Los Andes.

Con la fortaleza anímica que había generado la victoria de la fecha anterior, Unión entró al juego muy concentrado. Volvió a repetir el esquema, ya que se plantó con una defensa muy cerrada y ordenada. Además, no se desesperó en ningún momento. Aprovechó cada pelota recuperada para llevarle peligro al arco rival. La conducción en ataque de Carlos Pacín (de gran encuentro) fue clave para capitalizar los errores del rival y anotar dos goles.

En cambio, la visita generó poco y nada en ataque. Tuvo carente de jugadores de buena destreza individual y pocas ideas en lo colectivo. Apenas tuvo una llegada clara, en toda la primera etapa, que pudo contener Penovi.

En la segunda mitad, la escena volvió a ser la misma. Unión mantuvo un orden inalterable en defensa. Estuvo tan cerrado atrás, que generó que el rival saliera a presionarlo bien arriba sin mucha efectividad ni disciplina táctica. Y ante esta situación, a los de Ezpeleta se le abrieron los espacios en ataque. Así, circularon con fluidez la pelota, imponiendo un interesante ritmo en cada réplica para sentenciar la goleada.

Recién en los minutos finales del juego, el conjunto local tuvo algunas distracciones defensivas en su afán de seguir marcando goles. En ese momento, Los Muchachos generó varias oportunidades en ataque y terminó consiguiendo sus dos goles. De todos modos, cuando el tablero electrónico terminó con su cuenta regresiva, todo fue alegría en el gimnasio.

Ahora, el equipo que dirige Pichi Calahonra enfrentará el próximo sábado a J.J. Urquiza en cancha de Atlanta, con la idea de volver a ganar para seguir escalando lugares en la tabla de posiciones.