Referente indiscutido de Ducilo y de la Selección Argentina, el quilmeño Matías Paredes tiene sobre sus espaldas muchas batallas ganadas. Maduro tras su paso exitoso por las ligas de Alemania y Holanda, con un Olimpia de Plata en su haber y dos nominaciones a mejor jugador juvenil del planeta, viene de conquistar la Copa Panamericana y lograr una histórica medalla de plata en el Champions Trophy. Ahora, el volante-delantero de Los Leones repasa su carrera y confiesa su sueño de subirse al podio en el próximo Mundial a disputarse en los Países Bajos.

- ¿Cómo definirías este momento de tu carrera?

- Es un momento muy lindo, creo que cuando uno ya es más grande empieza a disfrutar mucho más todo lo que le va pasando. Con el club vamos mejorando y con la Selección obtuvimos buenos resultados en los últimos torneos.

- Sos un referente de Ducilo, ¿qué análisis haces del campeonato?

- La primer parte fuimos muy irregulares y perdimos algunos puntos que tendríamos que haber ganado. Esta segunda mitad sacamos buenos resultados ante los equipos que están arriba nuestro y, en estos últimos partidos, vamos a enfrentar a los que están abajo, así que tendríamos que poder sumar para entrar a los Play Offs.

- Hablando de referente, ¿sentís lo mismo en la Selección?

- La verdad que no me lo pongo a pensar. Obviamente que por una cuestión de cantidad de partidos, soy uno de los que más tiene, asumís una responsabilidad en algunos momentos. Tenés un poco más de derecho para hablar, pero acá somos todos importantes. Lucas Rey es el capitán y junto con Martín López somos los dos subcapitanes, así que nos encargamos de algunas cosas, pero a la hora de jugar o dar una opinión, todos tienen el mismo espacio.

- ¿Sos futbolero?

- Sí, bastante. Soy hincha de Boca y, por mi amistad con el Chapu Braña, siempre lo seguimos, cuando estuvo en Unión, Estudiantes y ahora que volvió a Quilmes. Por ese lado soy cien por ciento futbolero.

- Entonces ¿se siente especial llevar el Diez en el dorsal de la camiseta de la Selección, con lo que significa esa casaca para los argentinos?

- Desde chico que lo uso. Es un número que me gusta, pero sería lo mismo ese o el 17, sobre todo en hockey que se usan números altos y se hacen muchos cambios. Sin embargo, es lindo por lo que decís, por esa cuestión que en Argentina la diez tiene mucha mística.

- Vienen de ser campeones panamericanos e hicieron un muy buen Champions Trophy, ¿qué cambió desde la llegada del Chapa Retegui a la dirección técnica?

- La metodología de entrenamiento. Ahora entrenamos todos los días, muchas veces en doble turno y, además, hacemos pileta, boxeo y cross fit, es muy completo. A eso sumale todo lo que significa Retegui como DT, su energía, su carisma, algo que nosotros supimos absorber para sacar lo mejor de nosotros. Eso es lo que nos faltaba: volver a creer en nosotros y en que estamos a la altura de los mejores equipos.

- Comentaste que sumaron entrenamientos de otros deportes, como el boxeo, ¿es habitual eso en el Hockey?

- La verdad que no tenía referencias de que alguien lo hiciera. Estamos mezclando muchos deportes para desarrollar fuerza, velocidad y coordinación de brazos, aptitudes que en algún punto podemos utilizar para ser más rápidos, sobre todo en una disciplina tan dinámica como esta.

- En base a esta preparación y los buenos resultados ¿cómo ves a la Selección de cara a los próximos compromisos?

- Bien. Vamos a entrenar en Mendoza mientras las chicas juegan la Copa América (NdeR: del 21 al 28 de septiembre) y después ya viajamos a Australia a disputar una nueva modalidad de nueve jugadores contra Pakistán, India y varios más. Luego haremos test matches con Australia, que es uno de los mejores y te exige mucho físicamente. Estamos buscando tener muchos amistosos con esa clase de equipos.

- Disputaste dos Juegos Olímpicos (Atenas 2004 y Londres 2012) ¿qué te significó representar al país en un certamen de semejante nivel?

- Es lo máximo a lo que puede aspirar un deportista amateur. Cuando era chico pensaba en poder estar compitiendo ahí. Siempre que juego con Argentina es un orgullo y una sensación muy especial porque detrás de uno hay un montón de gente que lo apoyó para poder llegar a cumplir ese sueño de representar al país.

- ¿Todavía te queda algún sueño por alcanzar?

- Una medalla en algún torneo importante. Ya tengo 31, no creo que me queden muchos años más, así que esperemos poder estar en el podio del Mundial.

- Van por el buen camino…

- Sí, pero todavía falta mucho y hay que seguir sumando entrenamientos, partidos y sacrificio para llegar lo mejor posible.