Lo que hace una rueda atrás parecía un milagro, hoy empieza a soñarse como una posibilidad más que concreta. Argentino de Quilmes volvió a empatar como visitante, en este caso frente a un duro rival como Luján, y sigue sumando unidades para engrosar su promedio y así, evitar el descenso de categoría. De la derrota en la primera vuelta, que significó la salida del Búfalo Szeszurak a este presente en las manos de Oscar Santángelo, el equipo de la Barranca sigue avanzando en busca de su objetivo.

Otro buen punto ante un adversario que viene haciendo una interesante campaña. Hace 15 atrás había sido en Ensenada y frente a Cambaceres, ahora le tocó sumar en su paso por la Basílica, dejando en claro que es un conjunto muy complicado para cualquier rival que s ele ponga enfrente. Inclusive ahora, sabiendo manejar el trámite de los juegos y sabiendo que, cuando no puede ganar, el punto es más que valido (es apenas su tercera igualdad sobre 28 partidos).

Lo que no logró el Celeste en esta ocasión, fue conservar la ventaja que consiguió, al pegar primero a los 31 minutos del tramo inicial, a través de Cristian Tello. Parecía que esa diferencia podía llegar a ser positiva para la visita, pero al rato de haber comenzado el segundo tiempo, Luján llegó al merecido empate. Fue a los 12 minutos, cuando Matías Peralta se hizo presente en la red.

Pasó una rueda, mucho tiempo y diferentes vivencias transcurridas. En el balance la historia es por demás productiva, Argentino mejoró notoriamente, recuperó gol, comenzó a sumar con continuidad y se mantiene alejado de las últimas posiciones de los promedios. Con este andar, el milagro seguro será posible.