Mucha expectativa y demasiado fervor para un partido que tuvo muy poco importante como para destacar. Arrancó el sueño de Argentino de Quilmes en el Reducido y, tal como se esperaba, el equipo dirigido por Oscar Santángelo estuvo a la altura de las circunstancias, pero le costó poder quebrar a un rival duro como Defensores de Cambaceres, el subcampeón de la temporada. Fue empate sin goles, con bajas pensando en la revancha. La semi se define el fin de semana, pero el Mate está obligado a ganar.

En juego hay, nada más y nada menos, que un pasaje a la Primera B Metropolitana. Por eso, los cuatros candidatos que siguen con vida en la pelea por el segundo ascenso, no regalan nada, sabiendo que cualquier detalle puede llegar a hacer la diferencia en el camino de la clasificación. Y en un enfrentamiento de 180 minutos, los primeros noventa no dejaron demasiado para formar una conclusión definitiva.

Pero si hay algo que destacar, es que Argentino hizo más en pos de la victoria. Inclusive, dispuso de las mejores opciones para poder convertir, pero en la mayoría de esas chances se topó con el arquero Navarro. Por otro lado, el árbitro Cristian Benítez, ya que les sacó tarjeta amarilla a Cristian Tello del local y a Maximiliano Badell de los de Ensenada y ambos llegaron a la quinta, por lo que se perderán el partido definitorio. Otro que tampoco estará presente es Matías Polack, ya que fue expulsado en el minuto noventa.

El compromiso de vuelta se jugará el domingo, a partir de las 15 horas, y allí si deberá haber un ganador. El Mate sabe que está obligado al triunfo, pero también que su buena campaña como visitante lo mantiene con vida en la serie.