La Selección Argentina derrotó a su par mexicano con comodidad por 33 a 16 en el segundo compromiso por la zona B del Torneo Panamericano, que se disputa en Canelones, Uruguay. Los dirigidos por Eduardo Gallardo se lucieron en el primer tiempo y después manejaron el encuentro a voluntad. El quilmeño Leonardo Querín forma parte del plantel de los Gladiadores. El siguiente compromiso será ante Chile, en el partido más atractivo del grupo.

Si bien en los primeros pasajes los norteamericanos pudieron seguirle el hilo goleador, con el correr de los minutos se sumieron en una notoria impotencia. El conjunto albiceleste, con una efectividad asombrosa, pudo manejar a su gusto el trámite del juego. El aporte en el tanteador de Federico Fernández, Pizarro y Vieyra, le dio a Argentina el impulso necesario para alejarse de su rival.

De ese modo, pudo incluso agigantar las diferencias con veloces salidas de contra tras los robos de una defensa que se mantuvo en elevado nivel. Carlos Vázquez, el arquero azteca, se topó con la difícil tarea de proteger un arco que recibió ataques por todos los frentes y terminó cayendo en la primera etapa 18 a 8.

En segunda parte, la brecha entre ambos equipos se profundizó todavía más. Emergió en el equipo argentino la figura de Facundo Cangiani, que pudo convertir con asiduidad y también apareció Damián Migueles para reafirmar la supremacía del elenco nacional. Otro de los pilares que pudieron construir los Gladiadores se cimentó en Fernando García, que tuvo una brillante actuación para cerrarles definitivamente el arco a los mexicanos.

En definitiva, la segunda función de Argentina dejó un gusto mucho más que dulce que en su debut ante Groenlandia. Y las ilusiones crecen, pensando en que pueda ratificar su poderío en el continente.

Foto: web oficial