El Mate venía viviendo partidos de tramites parejos, en los que mostraba firmeza pero pocas situaciones. No sufría demasiado, pero tampoco hacía sufrir a su rival. A diferencia de esos cotejos, este sábado el elenco visitante se adelantó en el marcador en la primera jugada clara de gol. Tras un tiro de esquina, la pelota le quedó a Cristian Trombetta, que remató cruzado y Carlos Aguirre llegó a desviar para poner en ventaja a los dirigidos por Fabián Zermatten.

La respuesta del local llegó de inmediato con un disparo de Franco Sosa que desvió el arquero Ezequiel Cacace y dio en el travesaño. Pero, desde ahí en adelante, poco más pudo hacer en ofensiva durante la parte inicial.

Es por eso que, en el inicio del complemento Szeszurak realizó dos cambios, mostrando cierta inconformidad con lo mostrado por su equipo hasta ese momento. Pero a pesar de tener más la pelota, las modificaciones no le dieron demasiado resultado al Criollo, que mostró más ganas que ideas para llegar con claridad al arco contrario.

Para el cierre quedaron las mayores emociones. Primero avisó el Tambero con un tiro libre de Federico Maraschi que se desvió en la barrera y se fue apenas por arriba del travesaño y, a diez del cierre, Nicolás Muscio tuvo un mano a mano pero se lució Ezequiel Cacace con una atajada que evitó la igualdad.

Tres partidos en la barranca, dos empates y una derrota, sin goles a favor y ahora uno en contra. Demasiado pobre para un Argentino que aspira a dar el salto y mejorar la pésima campaña de la temporada pasada. Por ahora, todo parece costarle demasiado.