Por Leonardo Testa

Volvió el hockey y volvió el nivel que caracteriza a Quilmes A, que con una gran actuación de Juan Manuel Saladino goleó al colista Hurling. La actualidad del equipo dirigido por Mariano Ronconi no era la ideal en la previa, ya que al iniciar la fecha se encontraba lejos de los Playoffs, y necesitaba los tres puntos para mantener las esperanzas en la clasificación para la definición del Metro. Y el Cervecero no tuvo piedad ante el rival más flojo de la actual temporada.

La primera emoción de la tarde llegó enseguida, a través del palo de Juan Tubio, quien se tiró sobre el arco, para empujar la bocha y celebrar el gol que abrió el marcador del partido, tras un desborde de Saladino. Pese a la ventaja, el QAC siguió atacando y buscando estirar la ventaja, demostrando solvencia defensiva y con delanteros que estaban atentos a cualquier distracción en el fondo. Esa búsqueda se vio reflejada cuando el propio Saladino, de penal, puso el 2-0.

De esta forma, el conjunto dirigido por Ronconi se encargaba de demostrar una neta superioridad sobre su rival. Claridad en el manejo de la bocha, firmeza defensiva, con mediocampistas que salían agrupados a cortar los ataques y recuperaban rápido para contraatacar al equipo rival.

En la segunda mitad, Hurling adelantó sus líneas y fue en busca del descuento. Logró poner mucha gente en ataque y de esa forma recuperaba la bocha cerca del arco contrario, generando peligro constante. Y a los 15 minutos, se produjo el descuento a la salida de un corto: de arrastrada, Marc Gandly puso el marcador 2-1.

Ese gol no produjo ningún efecto anímico negativo en los jugadores de Quilmes, ya que en la jugada siguiente, apareció la categoría de Abel Encinas, para definir con clase y poner el 3-1. El tercer tanto le permitió al Cervecero mantener los hilos del encuentro, sin desesperarse, ni permitir una remontada del Verde. Con espacios en la delantera, Saladino comenzó a hacer su juego y tras una gran jugada individual, con amages incluidos, puso la frutilla del postre y decretó el resultado definitivo

Sin embargo, no todas fueron rosas para Quilmes, ya que cuando faltaban dos minutos para que termine el encuentro, a Javito Taboada le sacaron una tarjeta verde, y de esa forma llegó al límite de tarjeta y estará suspendido para la próxima fecha.

De cualquier manera, el equipo retornó a la actividad oficial con la alegría de haber sumado tres puntos importantes para acercarse a la zona de clasificación.