Era una oportunidad inmejorable. Como local, le tocaba enfrentarse a otro elenco que llegaba con bastante incertidumbre y del que apenas lo separaba un puñado de puntos en la tabla. Pero ni aún consiguiendo una diferencia impensada le sirvió al Mate para corregir el rumbo. El equipo se mantiene a la deriva futbolística y el futuro sigue asomándose como muy complicado.

El primer tiempo era muy parejo, con la visita sacando mínima diferencia por las bandas. Pero en la única que tuvo, el Criollo aprovechó una mala salida del arquero rival, para que Camilo Machado, de cabeza, pusiera la ventaja, tras un tiro libre desde el costado.

Y sin marcar distancia sobre su adversario, podría haber cerrado el partido en el inicio del segundo tiempo: buena jugada individual del ingresado Jonathan Cañete y penal. El balón lo tomó Elías Martínez (de muy flojo partido), pero su remate fue al cuerpo de Elías Fretes. Y para colmo de males, unos minutos más tarde, el rival volvería a complicar y, después de un balón al palo, en el rebite Walter Hermoso cometería falta. Expulsión por doble amarilla para el mediocampista y gol de penal para la UAI, a través de una exquisita definición de Santiago Prim.

El cuerpo técnico mate nunca movió el banco, inclusive a pesar que la visita daba claros indicios que lo podía ganar. Las llegadas se repetían, Argentino no reaccionaba y, tal como se preveía, Urquiza se puso en ventaja promediando el segundo tiempo, con Iván Paredes que tuvo la facilidad de meterse con balón y todo dentro del arco.

Las ganas y la rebeldía de un equipo superado lo llevaron a intentar la heroica. Que no se terminaría dando, por un error en la salida de Matías Correa, que le regaló el gol a Ezequiel Vidal, y porque otro penal, aunque en este caso fue bien aprovechado por el hombre gol del equipo, llegó en el minuto noventa, ya sin tiempo para volver a generar peligro.

No fue una derrota más. Se trata de un golpe demasiado contundente, que sumado a la flojísima campaña, obligar a repensar el rumbo. Más allá de la realidad institucional y el momento de transición, el panorama deportivo siempre incide en el humor del hincha. Solo el correr de los días determinará cuáles serán sus consecuencias.

Foto: Territorio Mate