El nerviosismo se sentía en el aire. Era un partido bravo para ambos equipos. El local, porque llegaba de tres derrotas consecutivas, con un plantel armado para pelear por el ascenso. Por el otro, un QAC que empieza a lucir una versión mejorada, más segura que la anterior, pero todavía le cuesta mostrar un rendimiento acorde a un conjunto que quiere pelear por los primeros lugares.

En el inicio, Gimnasia intentó ahogar al Cervecero, sin embargo no logró superar la solidez de los dos centrales -Tévez y Giampaoli-, los puntos más altos del elenco visitante. Esa primera etapa casi no tuvo situaciones, la pelota merodeó por la mitad de la cancha, con un andar repleto de imprecisiones por parte de ambos y apenas con algún que otro remate al arco.

Otro partido se vio desde el arranque del complemento. El Lobo, ante la necesidad de ganar, salió con otra decisión. Y pese a la falta de profundidad, comenzó a tener opciones de gol. Pero la más clara llegaría por un error en la mitad de la cancha del QAC, que le permitió a Gonzalo Rodríguez, quedar mano a mano, y tras una gran corrida por la izquierda, definió cruzado para hacer lucir a un Milton Álvarez.

Pasaban los minutos y la incapacidad de Quilmes de darle un buen destino a la pelota lo dejaba sin la chance de aprovechar los espacios que empezaba a dejar su rival. Apenas unos centros, en los que no llegó Anselmo o alguno de los mediocampistas habían sido la principal amenaza. Pero claro, servirían de anticipo para lo que llegaría sobre el cierre...

El partido se encaminaba hacia un empate sin goles, reflejando lo que había pasado en el campo de juego. Pero corrían 49 minutos de los 50 que se iban a jugar, cuando Bonetto lanzó un centro pasado desde la derecha, para que Sandoval, ingresando solo por el segundo palo, metiera la cabeza y con jerarquía terminara dejando a mitad de camino al arquero Chiarini y anotar un gol muy valioso.

Una jugada aislada, que valió un triunfazo. De esos que permiten ganar confianza y seguir creyendo. Sin el juego o el fútbol que se necesita para ser candidato, Quilmes va. Y al menos, desde el resultado, tiene argumentos para pensar en darle pelea a los líderes.

Foto: Gimnasia Jujuy oficial