Todo parecía que iba a ser color de rosa en territorio mate, porque el equipo de Juan José Serrizuela se puso en ventaja rápido. Pero nunca pudo tener el dominio del juego, es más, por largos pasajes fue superado por su rival, mostrando todavía las inconsistencias y los altibajos que tiene el Criollo en su rendimiento. Y también, por qué no, ciertos nervios por todo lo que está viviendo en tan corto tiempo y la expectativa que se había generado en la previa.

El gol de la apertura se daría a los 10 minutos, con un centro de Ian Pezzani desde la izquierda, que encontró bien parado a Bruno Rodríguez, y el número nueve -de buen presente- la terminó acomodando de cabeza junto al palo del arquero López. Pero la visita igualaría en un momento clave y que, quizás, haya sido determinante. Se jugaban 40 minutos de ese tramo inicial, cuando Jonathan Herrera definió de forma correcta.

De tanto ir, el Deportivo Armenio había tenido su premio. Y ese gol lo envalentonó para el complemento. Con el dominio de la pelota, los de la colectividad terminaron redondeando una mayor presencia en el partido, mientras del otro lado, el Mate se mostraba maniatado e inconexo. De cualquier manera, la igualdad fue justa y el punto le terminó sumando a los de la barranca.

Con el triunfo de Talleres, los de Remedios de Escalada le volvieron a sacar dos puntos de ventaja a Argentino en la punta de la tabla. Más allá de eso, el Mate tiene claro su objetivo y no se baja de ninguna pelea, ya que todavía queda bastante torneo por delante.

Foto: Juan Finazzi