En el primer tiempo, el Funebrero comenzó fiel a su estilo, proponiendo desde la combinación de pases para buscar a sus mediocampistas ofensivos. Sin embargo, no se arrimó al área del QAC, que armó un bloque bajo y buscó hacer daño a base de contraataques.

Una vez cumplido el primer cuarto de hora, tras un tiro de esquina, Martín Río cabeceó sin marca y Cristian Correa pudo desviar para un nuevo corner. Posterior a la ejecución del corner, y luego de un despeje defectuoso, Gabriel Díaz capturó la pelota de volea para anotar uno de los golazos de la fecha, haciendo que caiga como un misil en el arco rival.

La más clara de Chaca se daría recién en el final de esa primera parte. Ricardo Blanco ejecutó un tiro de esquina, Franco Quiróz desvió al segundo palo y Álvaro Cuello, que controló en el área chica, remató por encima del travesaño.

En el complemento, los dirigidos por Ariel Fuscaldo empezaron a recular cada vez más, perdieron por completo la posesión de la pelota, pero así y todo, Mario Sanabria tuvo una corrida por la izquierda y, en vez de tocar hacia el medio para Anselmo, decidió disparar al primer palo y forzó la atajada del guardameta local, que evitó otra caída en su arco.

Los locales no pudieron armar jugadas de peligro hasta entrados los últimos veinte minutos, cuando Aníbal Biggeri movió el banco de suplentes y encontró resultados. Sobre los 26 minutos, tras una enorme jugada colectiva, Coquito Rodríguez tocó con Claudio Pombo para realizar una pared, el 7 de Chaca enganchó dentro del área para desparramar a un defensor rival y culminó la jugada con un pase a la red para anotar el empate.

Cuando todo parecía estar a favor del Tricolor, llegó un baldazo de agua fría en San Martín. Quilmes no lograba pasar mitad de cancha pero, tras un defectuoso rechace de Franco Quiróz, Iván Ramírez -de lo mejorcito del equipo- recibió fuera del área, tuvo tiempo para acomodarse y sacó un zurdazo inatajable para volver a poner en ventaja a la visita. Podría haber sido el gol del triunfo, pero…

Tan solo dos minutos después, en el momento más frenético del partido, Chacarita aprovechó nuevas ventajas defensivas y llegó a la paridad una vez más. Luego de un centro de Rodríguez, que forzó una mala intervención de Milton Álvarez, la pelota le quedó servida a Pombo que, con el arco a su merced, sentenció el empate final.

No fue una gran actuación del Cervecero, es más, volvió a mostrar varas deficiencias, pero tuvo la voluntad y la fortaleza para pelear y enrredarle el encuentro a un rival que hoy por hoy es superior. Quizás, un buen reflejo de lo que le puede llegar a pasar en el Torneo Reducido, al que aspira llegar para poder seguir peleando por el ascenso.

Foto: QAC oficial