Si los cuatro goles que Belgrano le propinó en la última fecha del año pasado sirvieron para mover toda la estantería del equipo, esta misma cantidad que le encajó Boca Unidos, con baile incluido, en la reanudación oficial, potencian el bajón de Quilmes en la temporada y el mal comienzo para un sueño de ascenso que hoy queda a años luz de distancia. En los 40 grados de temperatura correntinos, el Cervecero pasó más calor de lo imaginado.

Las ilusiones que habían generado el cambio de mando en el banco de suplentes y los refuerzos que llegaron para darle más variantes a un conjunto que se mostró limitado en la gestación de juego durante la rueda inicial, se cayeron a pedazos en apenas noventa minutos. La flojísima imagen dejada por el QAC en su paso por Corrientes, abre un interrogante de cara a su futuro y a las posibilidades con las que contará para posicionarse en la tabla.

A diferencia de lo que suceda con los principales candidatos (léase San Martín de San Juan, Unión, Olimpo, All Boys) que mantienen su línea, su idea colectiva y que suman puntos importantes para separarse del resto del pelotón, en el Cervecero claridad es lo que no abunda y por lo que deja este el primer encuentro oficial del año, sumado a lo que venía realizando en la pretemporada, todavía esta lejos de la seguridad futbolística que debe mostrar un elenco candidato.

Bajo un calor agobiante, el partido resultó parejo en sus comienzos. Hasta que los locales comenzaron a aprovechar cada una de las ventajadas dejadas por su rival. Con la apertura de Cristian Rami, el mal momento de Quilmes se intensificó y ya nunca más pudo hacer pie. Salvo en los primeros minutos de la segunda mitad, cuando el ingreso de Caneo le dio un poco más de tenencia de balón al equipo.

El tercer tanto de Boca, marcado por Baroni después de un corner a favor, echaron por tierra cualquier posibilidad de remontada. Ahí, los correntinos jugaron a placer e hicieron lo que quisieron contra el Cervecero. Al punto de haber podido concretar una goleada aún más significativa, si no le anulaban de forma incorrecta dos tantos, por supuestas posiciones adelantadas.

No le queda otra a Quilmes que barajar y dar de nuevo. Solo el trabajo y las buenas intenciones limpiarán la triste imagen que el equipo dejó en su viaje correntino.

Síntesis

Boca Unidos (4): Leonardo Díaz; Baroni, Donatti, Juan Pablo Cárdenas; Alejandro Verón (ST 19’ Gerardo Gómez), Franco Amaya, Miguel Angel Benítez (ST 35’ Gabriel Correa), Fredrich; Monrroy (ST 26’ Gutman); Claudio Bustos y Rami . DT: Frank Kudelka. Sup: Mazzon, Gastón Carabajal, Ricardone, Gaspar Páez y Néstor Villalba.

Quilmes (0): Trípodi; Emanuel Martínez, Ribonetto, Sergio Rodríguez, Claudio Corvalán (ST Diego Cardozo); Garnier, Kalinski, Marcelo Guzmán (ST Caneo), Battaglia; Mauricio Carrasco (ST 23’ Paolo Cardozo) y Sava. DT: Jorge Ghiso. Sup: Pontiroli, Quiles, Meza Sánchez y Leopoldo Gutiérrez.

Gol: PT 30’ y 39’ Rami; ST 7’ Baroni y 30’ Bustos.

Amonestados: Díaz y Donatti (BU); Sava, Rodríguez y Garnier (Q).

Arbitro: Jorge Baliño.

Asistentes: Matías Beares y Juan Pablo Belatti.

Estadio: Huracán Corrientes (local Boca).

Foto: gentileza diario Corrientes Hoy