Pasó la lluvia y terminó de salir el sol para Argentino de Quilmes. Es que, pudo ratificar su ventaja y ganarle una especie de clásico a Dock Sud, el puntero y único invicto que tenía el campeonato. El equipo se mostró sólido para defender la ventaja sacada el sábado bajo el agua y acumuló su tercera victoria consecutiva, para confirmar la levantada en este tramo de la temporada.

El Mate había finalizado el primer tiempo arriba en el marcador, producto del gol olímpico que había convertido Jorge Grunenvald, y salió esta tarde a afrontar el resto del juego en dos tiempos, uno de 23 y otro de 22 minutos.

El mini-partido tuvo gran dinamismo y no dio descanso, ya que la visita salió decidida a lograr la igualdad, mientras que los de la Barranca con mucho sacrificio no dejaban resquicio alguno, para que su rival no se acercara al arco defendido por Pablo Nievas. Pese a eso, ambos se repartieron un par de llegadas de peligro, que podían haber cambiado la temática del juego.

Con el correr de los minutos, el nerviosismo se apoderó del puntero, que no solo perdía su invicto, también permitía que San Martín de Burzaco quedara a solo tres unidades de la cima de las posiciones. Y el Mate lo aguantó, pese a los embates del final, y terminó sonriendo por el mejor resultado conseguido hasta ahora en esta pobre temporada.

Con tres victorias consecutivas, el conjunto de Rizzo espera el último encuentro del año, con la mejor expectativa. Soñando con otro resultado que termine por catapultarlo a la lucha por ingresar al Reducido. Una zona mucho más familiar por historia y camiseta.

Foto: Unidos por el Mate