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Una mañana primaveral en pleno otoño fue el guiño de la naturaleza para asegurar que la Quilmes 10K sería todo un éxito. La carrera, con un circuito inédito a través del centro de la ciudad hasta la Ribera, nucleó a más de 450 atletas y aficionados, convirtiendo a la Plaza del Bicentenario, lugar de largada y llegada, en un verdadero epicentro deportivo para todas las edades. La prueba principal fue conquistada por Darío Núñez (30’58”), en Caballeros, y la histórica Elisa Cobanea (36’53”), en Damas. El reconocido chef Martiniano Molina participó de la ceremonia de premiación.

Tal fue el interés que despertó esta nueva competencia organizada por el triatlonista caletense, radicado en Quilmes, Crhistian Burgos, que la hora de largada -fijada para las 9.30 del domingo- debió retrasarse 30 minutos debido a la gran cantidad de gente que todavía quería inscribirse. A esa altura en el aire ya se sentía la expectativa por el comienzo de la carrera y, luego de la entrada en calor dirigida por un profesor de educación física, la mente de todos estaba fijada en disfrutar del recorrido que partía de la plaza, en dirección a la Ribera, recorriendo las calles Paso, Moreno, Sarmiento, Otamendi, Alem, Humberto Primo y Lavalle. Sí, por primera vez en mucho tiempo, la zona céntrica de la ciudad fue protagonista de un evento deportivo.

La Quilmes 10K también fue pionera en el distrito al sumar tecnología. Cada competidor llevó un microchip que, al cruzar la meta, indicó con exactitud el tiempo final en completar el circuito. Así, pudo determinarse sin margen a la polémica, los ganadores de las distintas distancias y categorías, que incluyeron premios en efectivo para los cinco primeros y distinciones a los 10 mejores.

El vencedor de la prueba atlética fue el quilmeño, radicado en Córdoba, Darío Núñez (30’58”), quien tomó la punta en el kilómetro 7 y fue imbatible. Lo siguieron el mendocino Wilson Videla (31’35”) y en la tercera posición el keniata Ismael Langat (22’20”). En Damas, la triunfadora fue la tandilense Elisa Cobanea (36’53”). Esteban del Reino y Sofía Romero se alzaron con la Aeróbica de 4 Km, mientras que Conrado Pesado hizo lo propio en la categoría de deporte especial.

Pero eso no fue todo, concluida la competencia, los más chiquitos también pudieron capturar todas las miradas en la Running Kids. Consistió en una vuelta a la plaza, con la idea de que tuvieran su carrera inicial y se motiven de cara al futuro. Luego, la ceremonia de premiación, co conducida por el ex atleta de elite y chef internacional Martiniano Molina, fue el gran cierre para una completa jornada que significó el auspicioso debut de una nueva competencia que, de afianzarse en el calendario, jerarquizará aún más la vida deportiva de esta ciudad.