Después de un parate obligado por la temporada invernal en el deporte de las tres disciplinas, el atleta Crhistian Burgos estuvo presente en el Half Marathon de New Balance. La competencia se desarrolló entre los bosques de Palermo y Vicente López con un circuito más que entretenido pasando por el paseo costero de ese municipio y hasta por debajo del estacionamiento de un hipermercado. El oriundo de Caleta Olivia, pero quilmeño por adopción relató en primera persona para DQ las sensaciones vividas en la carrera.

“Con un poco de nervios y con la expectativa de buscar una marca personal (poder bajar la 1h18’40"), llegué a la carrera con la tranquilidad de haber hecho un buen entrenamiento previo durante este último mes. Largué con un ritmo conservador junto a un amigo Maxi Passadore, que sería mi Liebre (ritmo a seguir). De arranque me puse detrás de él y me fue diciendo los parciales. Mantuve un ritmo ideal en ese comienzo, con un tiempo de 3’40" por Km. Rápidamente se nos sumaría una corredora de lujo: la representante olímpica argentina en Londres, Marita Peralta, que resultaría la ganadora en la rama femenina”.

“A medida que los kilómetros pasaban, el cansancio comenzaba a hacerse sentir. El Medio Maratón es una distancia muy exigente donde hay que ser muy prolijo si se quieren lograr resultados. Ya en el Km10 comencé a sobrepasar a algunos atletas que salieron muy fuerte y no pudieron sostener ese ritmo. En cambio, yo me sentía cada vez mejor (parcial 10km 36’45"), marchaba todo excelente y ya estaba casi en la mitad del recorrido. La verdadera carrera estaba por comenzar”.

“Hasta el Km15 necesitaría la ayuda de la Liebre, pero de ahí en más tendría que salir a buscar mi mejor rendimiento. A esa altura, el tanque de combustible marcaba que había nafta, entonces decidí jugármela e ir por dos corredores que tenía a 50mts de distancia. Promediando el Km18 les di alcance, pero solo pude pasar a uno. El otro resultó ser el gran triatleta profesional Matías Márquez, que terminó a escasos 20 segundos de mi marca… Ya en los metros finales, sentí el rigor de la distancia pero lo importante es que el ritmo y mi mente nunca decayeron. Llegué feliz al superar mi objetivo con h 17’29".”

“Esos números me sirvieron para ubicarme en el 6º lugar de mi categoría y 20º en la general. Siento que esto me ayuda a mejorar y me da más confianza en mi parte más vulnerable del Triatlón, que es la corrida”.

“Ahora se vendrá por delante los 7Km en Puerto Madero que es el 10 de junio y de ahí en más, encarar la preparación junto a mi coach, Hugo Pellegrino, para mis próximos objetivos”.