Con sus carencias a cuestas, Quilmes intentó ser protagonista en Córdoba pero terminó nuevamente derrotado. En este caso, frente a un pobrísimo equipo de Belgrano, que apenas puede justificar su triunfo en la contundencia ofensiva. El elenco de Pascutti volvió a mostrar sus limitaciones en ataque y terminó dejando escapar el encuentro por culpa de errores defensivos. El arbitro Alvarez no sancionó un claro penal en favor del Cervecero, que a esta altura, ve demasiado lejana su chance de ascenso.

No siempre querer es poder. Sobretodo, cuando no se tiene bien aprendido el libreto. Y eso es lo que le volvió a pasar a Quilmes, en su nueva salida al interior del país. Aunque el equipo intentó ser protagonista, volvió a fallar en la gestación y a sufrir debido a su escasísimo poder de gol que, nuevamente, se puso de manifiesto frente al Pirata.

Y justamente, en las limitaciones de los dirigidos por Pascutti pueda entenderse el triunfo de un muy pobre conjunto local. Los de Labruna aprovecharon una atropellada en los instantes iniciales del segundo tiempo y en su primer remate franco al arco, consiguieron una ventaja por la que habían hecho casi nada.

El tanto le sirvió a Belgrano para defender con más convicción la diferencia conseguida, pero poco pudo cambiar de su improductiva actuación. Pero esto no pudo ser aprovechado por Quilmes que, con menos tiempo en poder del balón que en la etapa de arranque, fue como pudo en busca del arco de Olave y en dos veces estuvo cerca: la primera la despilfarro Diego García al rematar totalmente desviado cuando iba a enfrentarse al arquero y en el final, el ingresado Nelson González alcanzó a puntearla tras un corner, pero el uno cordobés acertó en el achique.

Hasta que llegó la jugada del final y el error de Pontiroli que sentenció las cosas. El arquero intentó gambetear a Chavarría, pero éste le robó la pelota y se la llevó con el arco desguarnecido. Premio para el mejor hombre de Belgrano, gracias al desgaste realizado en el tramo final.

Historia repetida para un Cervecero, que se vuelve de nuevo a casa con las manos vacías, con dos hombres suspendidos para el próximo partido (Tucker y Luna llegaron a las cinco amarillas), con la bronca de un penal no sancionado (clarísima infracción de Turus sobre Carretero, al final del PT) y con la ilusión por el piso. Panorama demasiado sombrío, como para ponerse a pensar en sueños de ascenso.

Síntesis

Belgrano (2): Olave; Pautasso, Novaretti, Turus, José Cárdenas (ST 27’ Berza); Mansanelli, Farré, Lollo, Leandro Becerra (ST Franco Vázquez); Claudio Bustos (ST Héctor Cuevas) y Chavarría. DT: Omar Labruna. Sup: De Giorgi, Aldecoa, Javier Lux y Andrés Soriano.

Quilmes (0): Pontiroli; Sebastián Luna, Tucker, Fassi, Mauricio Almada; Roberto Bonet, Aparicio, Carretero; Olivares (ST 16’ Nelson González); Diego García (ST 35’ Piergüidi) y Juan José Morales. DT: Alberto Pascutti. Sup: Giordano, Manzanares, Quiles, Marcelo Guzmán y Enzo Kalinski.

Goles: ST 50’’ Farré y 48’ Chavarría.

Amonestados: Cárdenas, Cuevas, Vázquez y Berza (B); Tucker, Fassi y Luna (Q).

Arbitro: Luís Alvarez

Asistentes: Mariano Belinco y Adrián Rastelli.

Estadio: Gigante de Barrio Alberdi.

Foto: gentileza Cadena 3