Esteban Gini tuvo un papel destacado en la Blancpain Endurance Series a bordo de un McLaren MP4 12C GT3 en el circuito de Silverstone, Inglaterra, donde no solo redondeó una excelente labor sino que además acumuló una experiencia vital para la tercera fecha de la Porsche Mobil1 Supercup que se llevará a cabo durante este fin de semana en ese mismo escenario. El quilmeño recibió una invitación para formar parte de una fecha en este campeonato.

El objetivo de Tubo era claro: con el poco tiempo que tuvo para reconocer los circuitos antes de cada fecha con su Porsche 933 GT, la idea central era aprovechar para sumar experiencia sobre un trazado desconocido, a donde deberá volver este finde. La Blancpain Endurance Series es una carrera de 3 horas de duración en la que tres pilotos se alternan la conducción del auto, donde el quilmeño co-condujo su McLaren de 650 caballos de potencia con el brasileño Carlos Kray y el americano Rodin Younessi en la clase Pro Am.

La actividad se dividió en dos días: el sábado con dos entrenamientos y la preclasificación, y el domingo con la clasificación y la carrera. En la primera de las dos jornadas casi no giró el auto naranja con el N° 77 por un problema eléctrico, pero el domingo fue una gran demostración del potencial de Gini.

En la clasificación final quedó adelante de varios pilotos oficiales y a sus dos compañeros de equipo les sacó más de 7 segundos. El tiempo lo hizo en la segunda vuelta con 2m02s8, y como referencia el mejor McLaren, que además era oficial, hizo 2m02s0. Si se hubieran valido solo de sus marcas (se toma la sumatoria de los tres pilotos), hubiera clasificado entre los 10 de punta, pero finalmente se ubicó 24° en su clase.

La jornada culminó con la final de 3 horas de duración, donde Esteban condujo casi 1 hora y media con un gran ritmo hasta que a poco del final se reventó un neumático y debió ingresar a boxes para el recambio, pero cuando volvió a pista ya no hubo tiempo para más. El auto del MRS GT Racing llegó en el 19° lugar.

“Mi tiempo fue buenísimo, me felicitaron todos los miembros del equipo. Hay mucho material para trabajar es una gran categoría y están los mejores GT del mundo y los mejores pilotos. Bajar del auto y que todos los mecánicos e ingenieros me felicitaran y aplaudieran, fue buenísimo. En la final manejé a un gran ritmo hasta que se me reventó un neumático. Fue una experiencia única en un coche de más de 600hp. Muy agotador, pero aguanté el ritmo y terminé que era mi objetivo”, comentó el quilmeño.