Por María Laura Fernández

Perdía, pero en el segundo tiempo logró darlo vuelta y Quilmes alcanzaba un resultado vital en su lucha para mantener la categoría. Pero en el instante final del partido, llegó el empate final para las de San Isidro, que dejó plagado de amargura un Anexo Cervecero, que contó con la presencia de una gran cantidad de hinchas que fueron a apoyar a las chicas en este delicado momento deportivo. Con este empate, las cerveceras siguen en la cornisa.

Con una muy buena actuación de Daniela Pérez Casal y la vuelta de Mariné Russo tras la suspensión de un partido, el equipo de Fernando Hourquebie sostuvo su ilusión de triunfo, frente a un rival que tenía sus pilares en el sector defensivo, producto de la presencia de dos Leonas: la experimentada defensora Claudia Burkart y una gran arquera como Belén Succi.

Por eso, el trámite del juego se hizo bastante parejo y fue la visita la que consiguió la primera ventaja. Pero alentadas por la gran cantidad de público que con bombos y a puros cánticos se hicieron notar como nunca en el Anexo, las cerveceras fueron decididas a vender cara su suerte. Y el resultado fue positivo, porque con dos apariciones de Estefanía Núñez, logró ponerse en ventaja en el tanteador.

Y cuando parecía que iba a ser triunfo y los tres puntos se quedarían en su bolsillo, llegó el grito de alivio para la visita. A solo tres minutos del final, un tanto de Emanuela Peralta Martínez le dio paridad al marcador y terminó obligando a las quilmeñas a dividir unidades.

Podría haber ganado y hubiera sido clave, pero no fue. Por eso, la tristeza se apoderó de los rostros de las chicas, que en una semana comenzarán a definir sus chances definitivas de permanecer en la categoría.